Realícelo si no puede obtener la calidad de imagen requerida incluso después de realizar el flujo de ajuste diario (estándar) o en circunstancias como las siguientes.
Justo antes de imprimir tareas en las que el color sea importante
Cuando la estabilidad de color no sea suficiente (se prefiere mejorar la precisión de la capacidad de reproducción)
Cuando el tipo de papel sea diferente